Desde el LIS hemos podido comprobar que los vecinos de la zona comprendida entre Ramón y Cajal y la calle Nuestra Señora de la Cabeza también están sufriendo los efectos de las obras, dado que han sido retirados todos los imbornales o husillos del alcantarillado de esa zona.
La zona lleva más de una semana sin alcantarillado, sin que ningún vecino haya sido informado ni se le haya explicado por donde van a desaguar las aguas de lluvia.
Nuevamente rogamos encarecidamente que se apresuren los trabajos que se vienen realizando en esta calle para evitar mayores perjuicios tanto a los comerciantes como a todos los vecinos afectados por las obras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario